Desde Washington el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ordenó el viernes al Pentágono que detenga el proceso de reclutamiento en el cual se incluyen personas transgénero, el presidente también ordenó detener el pago del tratamiento hormonal a los que ya están en las Fuerzas Armadas, de los cuales no se conoce todavía su futuro laboral.
Estas medidas contradictorias a las realizadas por el expresidente Barack Obama de la nueva administración Trump se basa en la opinión de Trump, sobre el cual piensa que el Gobierno de Obama tomó la decisión sin pruebas suficientes de que el cambio “no entorpecería la efectividad ni la letalidad militar, ni alteraría la cohesión interna, ni afectaría a los recursos militares”.
Asimismo, dejó en manos del Pentágono la decisión sobre qué hacer con el futuro laboral de estos transgénero, que según un estudio interno son entre 1,300 y 6,600 dentro de un total de 1.3 millones de integrantes del cuerpo militar.