El presidente Donald Trump firmó una orden ejecutiva la noche del miércoles para prohibir que los inmigrantes indocumentados reciban beneficios financiados con fondos federales.
“Mi Administración defenderá el estado de derecho, protegerá los recursos de los contribuyentes y garantizará que los beneficios sean para los ciudadanos estadounidenses que realmente los necesiten, incluidos veteranos y personas con discapacidades”, establece el documento firmado por Trump.
El expresidente destacó que la Ley de Responsabilidad Personal y Reconciliación de Oportunidades de Trabajo de 1996 (PRWORA, por sus siglas en inglés) ya prohíbe a los inmigrantes indocumentados acceder a la mayoría de los beneficios financiados por los contribuyentes. Sin embargo, argumentó que, desde su aprobación, diversas administraciones han debilitado las restricciones establecidas por el Congreso.
Trump acusó a la administración de Joe Biden de haber violado la ley federal y expandido el acceso a beneficios financiados con dinero de los contribuyentes para los inmigrantes indocumentados. Según él, estas acciones han generado un “mal uso significativo de los recursos públicos” y han servido como un “imán” que incentiva la inmigración ilegal a Estados Unidos.
La orden ejecutiva de Trump instruye a los directores de todas las agencias federales a identificar programas que actualmente permitan a los inmigrantes indocumentados recibir beneficios, ya sean en efectivo o en especie, y a tomar las medidas necesarias para alinearlos con la PRWORA y otras leyes federales.
Asimismo, el expresidente ordenó a las agencias gubernamentales garantizar que los pagos federales a estados y municipios no subsidien ni promuevan la inmigración ilegal, ni respalden las llamadas “políticas santuario” que protegen a los inmigrantes indocumentados de la deportación.
Trump también pidió a las agencias federales mejorar los sistemas de verificación de elegibilidad para evitar que inmigrantes indocumentados accedan a beneficios financiados con fondos públicos.
Además, la orden asigna al Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), liderado por el empresario Elon Musk, la tarea de identificar todas las fuentes de financiamiento federal que puedan estar beneficiando a inmigrantes indocumentados y recomendar acciones adicionales para alinear el gasto público con la nueva política.
Finalmente, la orden ejecutiva exige que cualquier caso de beneficios indebidos otorgados a inmigrantes indocumentados sea remitido al Departamento de Justicia y al Departamento de Seguridad Nacional para que tomen las medidas correspondientes.
Esta medida forma parte de la estrategia de Trump para endurecer las políticas migratorias, uno de los principales compromisos de su campaña. El expresidente ha elogiado a Musk y al equipo del DOGE por ayudar a ejecutar sus órdenes ejecutivas, asegurando que sin ellos muchas de sus iniciativas serían ignoradas dentro del aparato burocrático del gobierno.
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