Spotify despedirá a alrededor de 1.500 empleados para reducir costos en una tercera ronda de recortes de empleo este año, dijo el lunes el director ejecutivo Daniel Ek al anunciar un cambio de estrategia “significativo” para la empresa de transmisión de música.
“El crecimiento económico se ha desacelerado dramáticamente y el capital se ha encarecido. Spotify no es una excepción a estas realidades”, escribió Ek en una carta al personal publicada en el sitio web de la empresa.
Los cambios de Spotify apuntan a hacer que la compañía sea más eficiente, devolviéndola a sus raíces iniciales después de que una ola masiva de contrataciones y gastos la ayudó a ganar decenas de millones de suscriptores, pero no la hizo consistentemente rentable.
Ek dijo que la empresa había debatido hacer recortes de empleos más pequeños el próximo año y en 2025. “Sin embargo, considerando la brecha entre nuestro objetivo financiero y nuestros costos operativos actuales, decidí que una acción sustancial para ajustar el tamaño de nuestros costos era la mejor opción para lograr nuestros objetivos”, añadió.
“Para ser franco, muchas personas inteligentes, talentosas y trabajadoras nos dejarán”.
Ek dijo que las reuniones individuales con el personal afectado se llevarían a cabo antes del final del día martes. Los empleados recibirán una media de cinco meses de indemnización por despido.
Spotify (SPOT), que emplea a más de 9.000 personas, despidió a más de 500 empleados en enero, uniéndose a una serie de empresas tecnológicas -entre ellas Microsoft (MSFT) y Amazon (AMZN)- que recortaban personal a medida que la economía global se desaceleraba. Y en junio, Spotify eliminó 200 empleados de su unidad de podcasting.
Las principales empresas de tecnología se lanzaron a contrataciones durante la pandemia de Covid-19 para mantenerse al día con el aumento de la demanda por parte de hogares y empresas de servicios como compras en línea y videoconferencias. Pero desde entonces, la inflación y el aumento de las tasas de interés han pesado sobre el gasto de los consumidores, han reducido la oferta de financiación de deuda y de capital y la han hecho más costosa, lo que ha llevado a muchos de ellos a anunciar profundos recortes de empleos.